DETECCIÓN DE POSIBLES FUGAS Y/O HUMEDADES
INSPECCIÓN DE TUBERÍAS CON DIAGNÓSTICO TÉRMICO
La idea de encontrar fugas en una tubería se ha investigado durante muchos años, sin embargo, con los nuevos productos lanzados y disponibles para uso público, el uso de drones ha aumentado drásticamente para convertirse en un enfoque estándar en fotografía, filmación y ahora inspección de activos subterráneos. En la práctica, se vuela un dron sobre la ruta de la tubería y se utiliza una cámara de imagen térmica montada en el dron para registrar las variaciones de temperatura del suelo, lo cual puede indicar si hay o no una fuga. En regiones calurosas donde el suelo está cálido, si hay una fuga, el suelo circundante es menos caliente debido al efecto de enfriamiento del agua que escapa de la tubería. Por el contrario, en regiones con temperaturas muy frías en el suelo, el agua que se escapa de la fuga calienta el suelo. Es importante tener en cuenta la hora del día en que se completan estas inspecciones para relacionarlas con la temperatura del suelo.
INSPECCIÓN DE TUBERÍAS UTILIZANDO CÁMARAS DE INFRARROJOS O IMÁGENES TÉRMICAS
Las tuberías deben ser revisadas regularmente y con cuidado en busca de fugas, especialmente aquellas que se encuentran en ubicaciones remotas y ocultas, lo que dificulta la inspección. En la mayoría de los casos, estos sistemas de tuberías se encuentran bajo tierra o se extienden a lo largo de largas distancias en áreas con acceso restringido y, además, la ubicación real de la tubería es difícil de identificar. Por estas razones, no es posible caminar a lo largo de estas tuberías ni localizar las válvulas o conexiones para realizar una inspección acústica.
Para resolver este problema, se identificó el uso de drones (anteriormente se utilizaba un helicóptero o avión, pero a un costo significativo). Este enfoque simple pero efectivo puede proporcionar información valiosa para identificar fugas mediante la programación del dron para volar sobre la ruta de la tubería y capturar imágenes térmicas en tiempo real del suelo debajo de la tubería.
El operador que controla el dron desde un lugar seguro tiene un conocimiento inmediato de las condiciones encontradas a lo largo de la ruta de la tubería y si puede haber una fuga o, de hecho, si existe un riesgo de daño en la tubería debido a otras condiciones del suelo.
El dron cuenta con dos cámaras, una para tomar videos generales e imágenes fotográficas de la tubería y otra para la imagen térmica. El software controlado por el operador en la estación base puede cambiar fácilmente entre las cámaras según sea necesario. La capacidad del dron para detenerse y mantenerse suspendido sobre una ubicación sospechosa, acercándose cuando sea necesario y al mismo tiempo inspeccionando la región circundante, ha sido una gran ventaja en la investigación detallada de fugas.
DRONES PARA ACTIVIDADES DE DETECCIÓN DE FUGAS
Los drones equipados con cámaras infrarrojas o térmicas son utilizados por empresas de agua en todo el mundo para localizar fugas y reducir pérdidas.
Muchas empresas de agua han capacitado a su personal en el uso de drones, lo que permite a la empresa de agua encontrar rápidamente fugas en ubicaciones difíciles que no son visibles a simple vista. El estudio de fugas se realiza normalmente en las primeras horas de la mañana, cuando la temperatura del suelo está en su punto más bajo, lo que facilita la identificación de fugas subterráneas. Los operadores de drones están autorizados por la Autoridad de Aviación Civil.
Normalmente, la temperatura del agua que escapa de una fuga es más alta que la temperatura del suelo circundante, lo que significa que se mostrará como una mancha de color cálido en la cámara de imagen térmica.
El proceso de detección de fugas de agua mediante termografía aérea con drones suele seguir estos pasos:
Preparación: Se realiza una planificación previa del vuelo del dron, definiendo las áreas a inspeccionar y estableciendo las rutas de vuelo.
Captura de imágenes: El dron vuela sobre la zona de interés y captura imágenes infrarrojas utilizando una cámara termográfica. Estas imágenes registran las diferencias de temperatura.
Análisis de las imágenes: Las imágenes capturadas se procesan y analizan utilizando software especializado en termografía. El software identifica las áreas con cambios de temperatura significativos que podrían indicar la presencia de fugas.
Inspección adicional: Una vez identificadas las posibles fugas, se puede llevar a cabo una inspección adicional en el terreno para confirmar la presencia de la fuga y realizar las reparaciones correspondientes.
Es importante destacar que la termografía aérea con drones no proporciona una detección precisa de la ubicación exacta de las fugas, sino que identifica áreas sospechosas que requieren una inspección adicional. Sin embargo, esta técnica puede ayudar a agilizar y optimizar el proceso de detección de fugas, especialmente en áreas extensas o de difícil acceso.
Es recomendable contar con personal capacitado en la interpretación de las imágenes termográficas y en la inspección de las posibles fugas, para asegurar una correcta detección y reparación de las mismas.